Michael Jackson cumplió 50 añitos

|

¿Y éste quién es?

Sí, cumple cincuenta pirulos. Increíble, ¿no? O aunque sea para los que, lamentablemente, no le seguimos el rastro a Michael, saber que ya tiene edad como para decir que no es más un "gran niño", genera una sensación rara. Quizás por algún tipo de fuerza que se le pueda adjudicar al cinco y, sobre todo, al cero, concluyendo en ese "50", se puede sentir una suerte de realidad objetiva que viene a evidenciar la edad del Rey del Pop. Ahora, ¿qué tiene que ver la foto del tipo éste de acá arriba, sonriendo a medias, parecido a un profesor de filosofía política de una Universidad de EEUU? Bueno, según el Daily Mail, es así como se vería Michael Jackson si no se hubiese hecho ninguna cirujia. También increíble, ¿no? Aunque pensándolo bien, no es tan increíble. Están los que creen en la palabra de Jackson, y aluden su cambio de piel al vitíligo (enfermedad degenerativa), pero convengamos en que muchos de nosotros sospechamos de tal argumento y, de hecho, creemos que el tipo se metió en el quirófano (el quirófano posiblemente sea en Saturno), varias veces, para "volverse blanco". Como, siempre que puede, un amigo pregunta, mirando a los ojos de cada uno de los interlocutores: "¿Ustedes se dan cuenta que el flaco se cambió el color de piel?".

El flaco se cambió el color de piel (o se la cambiaron)

Así es. No sabemos cómo, por qué o por quién pero se volvió blanco. Ahora, hay varios puntos interesantes con respecto a este hecho, pero me gustaría empezar por el más superficial: la pinta, el aspecto, la facha de Michael. No quiero que el tema se vuelva la exposición paranoica de una teoría pseudo conspiracionista, pero el modo en el que se trata el tema de su cara me hace acordar, pero de manera grotesca, inversa o irónica, al caso de Jesús. Me acuerdo que, hace unos años, cuando todavía iba a la escuela, en la estación de tren, en el puesto de diarios, en la tapa de un Clarín, había salido esta foto:

Y debajo de ella, el diario rezaba: "Este habría sido el rostro de Jesús". La sensaciones de un adolescente estimulado por adolescentes lecturas y músicas de ese entonces devinieron en un "Jaj, claro, ¿qué iba a ser? ¿el rubio de ojos claros de las estampitas?". Obvio. Pero eso no importa (cómo se estableció la imagen de J. C.), lo que acá me interesa es el paralelismo bizarro entre este hecho y el de Michael. A grandes rasgos: el Jesús "posta" (supongamos que "Clarín no miente") era morocho, de pelo enrulado, nariz regordeta, labios carnosos y rasgos duros, mientras que el Jesús "trucho" es ese rubio, de pelo lacio, ojos celestes y barba re fachera. Conclusión: alguien (¿el Papa?), alguienes (¿las corporaciones?), algo (el Poder capilar foucaultiano) o ninguno, o todos juntos se encargaron de modificar la imagen de Jesús, y esta nueva imagen de Jesús "Brad Pitt" Cristo es la masiva hasta el día de hoy. ¿Y con Michael? (y acá está la paradoja): el Michael "posta" era morocho (o negro o de color o de piel oscura o las palabras que Holywood y el gobierno quiera), de pelo enrulado y de nariz regordeta, mientras que el Michael "trucho" es blanco, blanco, blanco y más blanco, de pelo lacio, nariz hiper finita y labios rosados casi rojos (!!!???). Conclusión: alguien (un cirujano plástico), alguienes (los destiladores de naranjas), algo (una enfermedad) o ninguno, o todos ayudaron a que la piel de Michael, hoy, sea blanca. ¿La paradoja? que con Jesús, si bien hay gente que quiere que la imagen del hijo de Deus sea reemplazada por la de Clarín, la imagen que lidera y seguramente lo seguirá haciendo es la del Jesús de Mel Gibson. En cambio con Michael pasa al revés: puede haber gente que crea en una enfermedad de la piel o gente que crea en una enfermedad del cerebro que lo llevó a cambiarse la piel; sea como sea, el pasado negro de Michael existe, no como un estigma (como en el caso de J. C.) sino como la evidencia de algún tipo de anomalía en el cuerpo o mente de Michael. El pasado negro y feliz justifica el presente enfermo y blanco. No se lo elimina. Ahora, todo esto, si se lo deja acá, termina siendo pura anécdota basada en los distintos tipo de piel, típica de un blanquito (como traducirían) o no. Pero el paso siguiente, creo yo, es preguntarse: ¿y eso qué importa?. Digo, si vamos a hablar de Michael, y no de su espectacular música sino de su recontra freak personalidad, ¿cómo podemos encararlo sin caer en el lugar común? Yo propongo la siguiente mirada.

El Michael TRANS que yo quiero

Supongo que los editores del suplemento SOY, Daniel Link, los herederos de Copi o cualquiera que se ocupe de la palabrita del título, TRANS, se horrorizarían al leer mi propuesta ya que, me imagino, verían en ella nada más que una nueva forma de conservadurismo o algo así. Puede ser. Pero no importa, no porque sus voces no importen, para nada, sino porque mi propuesta no se enmarca en las líneas de la sexualidad (solamente), sino en las de la performance excéntrica, en el personaje mediático, en alguien al que le dijeron ser El Rey del Pop. Alguien que se llamó El Rey del Pop.


Este es el personaje del que hablo. La foto no es muy buena para poner en un blog ya que no se le puede ver bien la cara, además sabemos que hay miles de fotos mejores en las que se puede ver el elemento TRANS en sus rasgos faciales, dando vueltas por, la siempre erótica, internet. Pero ampliando la foto se puede ver el caracter TRANS del que hablo. ¿Por qué TRANS? ¿Qué es TRANS o en qué sentido uso el término? Lo uso para contornear y colorear la idea de Michael Jackson. A medida que defina a Michael se irá armando el concepto TRANS (qué chantada, ¿no?). Esta foto se la sacaron creo que la semana del 18 de agosto, en un shopping. En internet la publican, en general, bajo el título de: "A Michael Jackson se le está cayendo la cara". Claro que eso no es cierto, pero es fabuloso. El tipo, en ese sentido, inventó (o le inventaron o se inventó; convengamos que él es el responsable) la posibilidad alrededor de su cuerpo, de poder hacer creer que su cara se está cayendo. Oscila, como los (excitantes) personajes decadentistas, entre la vida y la muerte. O mejor: entre la vida excéntrica y la putrefacción. No es que puede estar muriéndose: no: puede estar pudriéndose, deshaciéndose. Además se puede ver la contratapa de un libro grande, negro y rojo. Ese libro, que en otra foto se puede apreciar mejor, es El Libro Del Dragón. Acá se editó con las pinturas de Ciruelo. El tipo, con El Libro Del Dragón (sí, así como suena), vestido como si lo hubiese agarrado una bomba nuclear, con anteojos para leer en la mano (claro, no hay pose en Michael, él lo va a leer al libro, es mucho más que una pose, pero tampoco es -la asquerosa palabra- auténtico; es TRANS) y, quizás uno de los detalles más escalofriantes, atrás de él está la sección de comics Manga. Escalofriante, no porque tema por esos libros, por las menores ventilando sus upskirts, los tentáculos violando mujeres-gatitas o las colegialas siendo pervertidas por profesores. No; lo escalofriante acá es cómo este personaje, como si fuera un agujero negro, succiona la realidad que lo rodea y lo obliga a ser por-él. Podría haber habido un estante de música, o de literatura universal, o de esoterismo, sin embargo estaba el obvio, el que nadie esperaba.

¿Y en la cara qué tiene? En esta foto se ve mejor. Alto lime.


Por un lado su hija (o quién sea; siempre una criatura en sus brazos) y por el otro lado... ¡la cara! Supuestamente son curitas porque supuestamente la supuesta hija le golpeó supuestamente sin querer su supuesta cara y esta es la supuesta manera de curarse (no quiero caer en el chiste fácil, pero no siempre puedo evitar lo que no quiero: si es esa la razón de TODO lo que tiene en la cara, da la sensación de que al tipo le dan un pelotazo y la jeta le explota ¿no?).

Entonces: por un lado el carácter obvio, del que todos hablamos, de su piel TRANS. Blanco y Negro o Black and White, él se hizo cargo de convertirlo, de materializar ese aspecto TRANS en una de sus canciones (a pesar de que no sea sobre sus cambios de piel ¿qué más provocador que Michael Jackson le ponga Black and White a un tema, mientras estrenaba su más refinada blancura?). Por otro lado, su imagen de salvador del mundo de los niños, con un Neverland en su casa, rodeado de pendejos, con los records de donaciones millonarias hecha alguna vez por un artista, con los miles de miles de fans llorando, angustiados de alegría, McCuley Culkin viviendo con él, los animales en su casa, etc., etc. Y esta imagen, esta realidad verdadera y tan superficial como de fondo, mezclada con la excéntrica, de pedófilo, evasor de impuestos, manipulador, gastando millones y millones en muebles, un ajedrez, maquillajes, mentiroso, comprador de tribunales, con una mujer pagada, sacando al hijo por la ventana, yendo al juicio en pijama, etc., etc. Ninguna de las dos es menos real, menos superficial y/o menos de fondo que la otra. Están ahí, en su economía TRANS, en sus gastos TRANS, en sus gustos TRANS.

El Planeta Decadentista


Basta ver esta imagen para saber de lo que estamos hablando. En Planet Hollywood, hace un par de días, con ese aspecto completamente andrógino, con su ropa TRANS (no de travestido, o sí, pero no de hombre a mujer o al revés, sino de "hombre de entrecasa" -¡en pijama!- a "estrella del espectáculo"), sus anteojos de diva y sus bracitos, los dedos retraídos, solo, con el brushing perfecto y el oro, la zebra y las palmeras que lo rodean. Este es el Michael TRANS que yo quiero. Quizás sea necesario la aclaración: "el Michael TRANS que yo quiero" no quiere decir qu elo pretenda para toda la humanidad, para todas las estrellas, lo justifique, defienda o acuse. Quiere decir eso: una frase que, a pesar de que suena mal, tiene algo superficial atractivo. Y como ya sabemos que no hay nada debajo de la superficie (al igual que no hay nada debajo de la máscara de cara que tiene Michael) no hay nada oculto en el sintagma.

La gran pregunta en torno a Michael Jackson

Creo, no pertinente ni mucho menos necesario, pero quizás algo (ALGO; un poco) divertido hacerse esta pregunta. En primera instancia, aunque sea a mí (y supongo que a los que estén leyendo esto también), después de ver las imágenes y videos polémicos sobre Michael, después de leer alguna breve biografía o charlar con amigos la vida de esta mega estrella, uno no llega a preguntarse "¿Por qué?". Antes de la pregunta hay una resonancia que me invade (¿nos invade?), casi automática, quizás esquirlas de conceptos del psicoanálisis, de la mediocridad o de la más alta medicina, que me dice "Qué enfermo". El tipo está recontra mil tocado. Y así uno puede, de alguna manera lejana, tratar de comprender los actos (y caras) de éste personaje. Sin embargo, en un cumpleaños reciente, charlando con un amigo, nos pareció más excitante pensarlo de la siguiente manera. No es ningún gran descubrimiento y seguramente muchísima más gente de la que me imagino ya se lo planteó. Pero no importa. Vale preguntarse de vuelta: ¿y qué si todo esto que hizo, hace y posiblemente vaya a hacer, todas estas excentricidades, locuras, abusos, actos autodestructivos, humillantes y mucho más, fueron, son y serán nada más que por plata? ¿y qué si el tipo está totalmente cuerdo, te puede hacer un asado, calentarse con Natalie Portman, tirarse un pedo, todo igual que nosotros y, sin embargo, todo lo que creó a su alrededor, en su cara y en su supuesto interior fue por plata? Piénsenlo cuerdo. Los decadentistas eran decadentistas, no porque eran netamente decadentes, sino porque podían apreciar eso de los que sí lo eran. Y esos nunca hubieran podido llegar a "ser famosos", a ser grandes poetas. ¿Y si es todo, todo, todo por guita? Imposible no es.


3 olores:

the fragile dijo...

Empezando por el final: imposible no es. Claro que no! solo basta con mirar las fotos y pensar que NO haria este tipo.
Y ahora lo uno con lo del parrafo de J.C. (que ya suena casi a la mega estrella mas famosa del mundo-- "shei si"). Una amiga me comento acerca de un libro en la que el protagonista antes de hacer algo se preguntaba "que no haria JC?". Algo que tambien asocio con la cantidad astronomica de libros con titulos como "Jesus es Rey"; "El Rey Jesus"; "Jesucristo Rey" etc. Otra coincidencia: ambos (michael y jc) son nombrados reyes.
Da para mucho mas este post. Este comentario es una breve reflexion acerca de lo que lei.
Como siempre fer, excelente.

Mío dijo...

Jajaja, qué buena coincidencia la de la cita del libro que te comentó tu amiga! Qué libro es?
Para mí también da para muchos otros posts. De hecho -como ya lo comentamos "en vivo" alguna que otra vez- el día que la crítica musical, académica, "seria" o como guste llamarla, agarre la obra de Michael Jackson va atener tela para rato. Y ni hablar si lo agarran los Estudios Culturales; entre la creación de la imagen, el conflicto con la ley, la música, los fans, etc. etc. van a tener para varios tomos.

Saludos!

Debra dijo...

Si fue ficción el mismo acto de hacerlo ya es realidad.Si te dicen una cosa muchas veces acabas por creertelo pues algo le sucederia como esto.Si ese Trans lo hubiera creado, eso no lo sabremos . Pero no maltrato a nadie, fue buena persona, no dicen las personas que hagas lo que quieras con tu vida o solo se puede aplicar a uno mismo?
Me ha gustado este post.Es diferente de todos los demasque solo critican, todos con sus prejuicios de la envidia que poco listos, que ignorantes.